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viernes, 9 de abril de 2010

Por dentro

No quiero morir mañana sin darme a conocer...
y no es que piense morir mañana,
es que ese dulce sueño sucede sin permiso,
aparece  sin anuncio...
No quiero  que haya preguntas sin responder.
Quiero que sepan  de mi, quien soy, no la que parezco ser...
Que hay más allá de mi piel, lo que no digo, lo que callo,
de mi mundo mágico que se resiste a los grises de la adultez.
He nacido en un siglo equivocado...
o tal vez no debí nacer.
Debi ser un sueño, la cuerda sonora de un violín,
un arpegio, el trino de un pájaro, la espuma del mar.
Siento que no me alcanza la piel,
el alma se expande tanto que duele el pecho.
Rafagas de emoción me ahogan,
los ojos rebeldes  permanecen absortos
desbordan como rios invisibles por dentro
Vivo de emociones, de sueños,
vulnerable hasta el limite del absurdo,
a la indiferencia, al destrato,
a la mirada esquiva, a la caricia negada,
a la actitud solapada casi imperceptible.
Con un silencio  imperturbable, que encierra lágrimas y dolor.
Testigo mudo de las miserias que nos dominan.
Percepción, intuición, premonición casi telepatica, mantiene mi espiritu en vilo...
Momentos supremos de comunión con el universo,
de serena armonia y goce perfecto
momentos de desazón ante la imperfecta realidad humana.
No quiero morir sin que sepan de mi.... quien soy,
los nietos de mis nietos, no conoceran mi nombre, ni mis sueños, ni mi voz,
no habrá nadie que sepa que vivi hoy.
Pero mis sueños me  mantendrán viva,
la fantasia crece, tiñe con sonrisas mi interior.
Sigo volando con los pájaros, hundiendome en el pasto al sol,
revolcandome en la espuma salada,
perdiendome en un sendero boscoso a la hora del rocio,
Viajando  al cielo pecoso de estrellas,
bailando entre luces infinitas  del universo.
Nunca renunciaré a soñar, a ver más allá,  a sentir antes que saber.
Con el corazón bien abierto y los ojos cerrados  mirando dentro,
con los sentidos despiertos... mi mundo privado es inmenso!!!,
poblado de sensaciones, de ideas, de sentimientos, de percepciones.
Un mundo  se agita por mi alma y mi cuerpo,
un mundo tan parecido al infinito,
que no se si está  fuera o dentro.
No se si me explayo, me extiendo o me contengo
o simplemente es la alegria, la paz en comunión con el universo.