No conozco tu cara, no se tu nombre

No percibo tu calor ni escucho los latidos de tu corazón

No te siento, no te veo, no te escucho…..

Solo a la distancia y en la imaginación

crece avasallante, milagrosa y tierna tu figura.

Qué locura!.... con solo nombrarte se me alborota el corazón,

Se empañan mis pupilas y una sonrisa traviesa se descuelga en mi cara.

Con solo nombrarte un revuelo de mariposas juguetea en mi alma,

reviviendo sensaciones olvidadas.

El cuerpo me queda chico para sentir el milagro de la vida,

Se desborda de emoción, se estremece y florece el pecho,

ante tu inescrutable realidad.

M e sorprende una inquietud juvenil por hacer y hacerte

Todo es alegría con solo pensarte.

No sos mio , pero sos mi sangre.

Soy libre de disfrutarte,

Que paradoja…en vez de envejecer, contigo he vuelto a nacer….(iad) 2008

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